Translate

jueves, 28 de mayo de 2015

Gente tóxica e intoxicada

Debo ser muy mayor, porque hay comportamientos que me dejan de pasta de boniato, pero de un boniato muy reseco, de una pasta como la piedra. Uno de ellos que vengo observando hace años es que no sólo la gente se droga igual o más que antes, sino que al contrario que los drogadictos de antaño, los actuales hacen alarde de sus hábitos, que no son precisamente de monje. El drogadicto de hace más de 30 años buscaba los descampados, las traseras de colegios retirados, edificios abandonados, o la acera de debajo de mis ventanas porque daban al descampado, y no iba diciendo a desconocidos las micras que disolvía en su cucharilla.
Supongo que todo empezó mucho antes de que yo empezara a notarlo. No sé en qué ambientes se desarrolló esta tendencia a admitir públicamente lo que se mete cada cual. Sería muy fácil buscar culpables retrocediendo en el tiempo y achacar esta conducta toxicomaniacaexhibicionista a personajes controvertidos y televisivos.
Da igual cuantos famosos mueran al año a consecuencia de estos hábitos que se airean públicamente con más o menos reparo y se excusan en insomnios, tomando algo para dormir, y por la mañanita algo para espabilarse para combatir la sustancia que les durmió de más.
Supongo que ya nadie recuerda los salvajes 80, y las cosas que los niños de entonces tuvimos que ver a nuestra tierna edad (yo los tenía debajo de mi ventana). La memoria de aquello ha quedado tan sepultada para las nuevas generaciones que no sirve de escarmiento.
Supongo que los drogadictos de hoy no han visto como el descampado donde aprendieron a montar en bici se convertía en un campo no de trigo, sino de jeringuillas usadas, que aunque recogieras para que no se pincharan tus hermanos pequeños, otros niños y tú mismo, a los pocos días volvía a reproducirse la cosecha como mala hierba.

Es lógico, porque hay muchos jovenes que no han desarrollado su no muy lejana infancia en descampados, ya que no había debido a la burbuja inmobiliaria; por lo tanto, no se puede echar de menos lo que no se ha tenido.
Ver como tu zona de juegos, donde en tiempos había tanta seguridad por parte de tus padres que te dejaban estar jugando hasta la noche, e incluso cenar, acercándote a tu balcón a recoger el bocadillo de tortilla que tu madre te tiraba en una bolsa, se convertía en territorio vedado y peligroso, acabando arrinconado en tu casa viendo en la tele las películas de Estrellita Castro que ponían en la 2, cuando se llamaba "la segunda" porque se había terminado la programación infantil.
Que no me digan los jóvenes drogadictos de hoy que no saben que aquello que compran de manera ilegal es precisamente ilegal por sus efectos perjudiciales. ¿Sabéis qué? Me da igual lo que toméis, pero encerraros en vuestra casa: NO CONDUZCÁIS, porque me da igual el drama que me contéis para justificar vuestra adicción, sois asesinos en potencia. Encerraros en vuestra casa, expoliad a vuestros padres, a vuestras novias, si se dejan, hasta que se cansen y os denuncien. Y cuando os quedéis sin curro, sin financiación para seguir consumiendo la mierda que enriquece a esos que luego criticas por Twitter: haz de mula, y disfruta de tu estancia en la cárcel de cualquier parte del mundo donde vayas a recoger la mercancía que estará !OH, CASUALIDAD¡ en un país subdesarrollado, donde, TE INFORMO, las cárceles no están tan organizadas como aquí, por si no lo sabes te recomiendo que busques el programa ENCARCELADOS y disfrutes algún capítulo dedicado a esto. Tal vez creas que las pelis exageran, pero te recomiendo antes de que te metas la cuarta raya de tu vida, o estés enrollándote cigarritos de la risa que te pases una tarde viendo cine carcelario, y no me digas que no sabes dónde encontrar las pelis porque si eres capaz de localizar camellos que te vendan material puedes bajarte pelis como las siguientes:
  1. Cadena Perpetua, será antigua para ti, pero los códigos carcelarios que se muestran en esta película son universales.
  2. Fuga de Alcatraz, sale Clint Eastwood, supongo que le conocerás al menos de oídas, en tu infancia reciente te sonará por haber ganado algunos Óscar.
  3. Get the Gringo, o Vacaciones en el infierno. Te ofrezco los dos títulos por los que es conocida para que entre calada y calada no tengas que romperte la cabeza. Es de Mel Gibson, te tiene que sonar, porque es el poli sonado de las infinitas partes de Arma Letal que tu papá, si tuviste, veía en la tele. Ésta te servirá para que veas como es una cárcel de país subdesarrollado y contrastes que lo de esta peli no difiere mucho del programa que te menciono: ENCARCELADOS.
Para que no uses la falta de información como excusa, y dejes de frivolizar con el uso de las drogas, empujando, coaccionando y presionando psicológicamente a todos aquellos que te afean la conducta no compartiendo tu vicio, te daré una pequeña lista de películas que te ilustrarán, por si no te gusta Cuéntame Como Pasó (RTVE):

  1. EL PICO, hay varias partes.
  2. PERROS CALLEJEROS, ídem.
  3. COLEGAS
  4. NAVAJEROS
Si las llegas a ver seguramente no te identificarás con ese tipo de drogata, al que consideras un marginal prácticamente abocado a ese vicio para combatir su vacío existencial y falta de oportunidades. Pues conviviendo con estos toxicómanos procedentes de extrarradio convivían esos toxicómanos elevados a la categoría de cuasidioses que conformaron la variopinta fauna de la llamada Movida, y junto a ellos todo tipo de jóvenes y no tan jóvenes procedentes de cualquier estrato (capa) social. Te recomiendo un buceo por YouTube y veas entrevistas como la de la mismísima Lola Flores reconociendo tener este problema en su casa, como a periodistas de realeza reconociendo algo similar. Entrevistas de los 90 en adelante, donde el goteo de confesiones propias y ajenas de estas características no han dejado de producirse, hasta llegar a los muy difíciles de callar deterioros nasales mal recompuestos de gente muy actual.
¿Pero hoy es guay decir yo consumo esto o lo otro no? Hacer ver que eso es como el que come chocolate a deshoras, es genial. Por si el sufrimiento que causas, o causarás a tus seres queridos no te es suficiente te recomiendo que vayas a la web de RTVE y en su sección de A la Carta busques los Informe Semanal, Documentos TV dedicados a todo esto, en concreto a las madres gallegas que se asociaron para combatir.

Paso de seguir, porque a vosotros nadie os convencerá de nada, hasta que no se os caiga la nariz o matéis a alguien con un coche.
Pero me pillas de buenas y te voy a localizar enlaces para que llegues a razonar por qué narices eres capaz de introducir en tu organismo algo que no ha pasado por ningún control sanitario de una autoridad oficial y sí ha pasado por el recto (lo que da forma a lo que sale por tu ano) de un desconocido que tampoco habrá pasado ningún control sanitario de ninguna autoridad oficial, pero en cambio eres capaz de tirar un pack de yogures porque la fecha de caducidad ha corrido en dos días.
Te lo vuelvo a repetir, por si te perdiste entre tanta coma: LO QUE TE FUMAS, LO QUE ESNIFAS HA SIDO CAGADO POR ALGUIEN a buen seguro.

Destrozarse los brazos, destrozarse la nariz, quedarse vegetal en un accidente de tráfico o parapléjico. Destrozarse la vida, y de paso las ajenas. No os crucéis conmigo.




miércoles, 6 de mayo de 2015

Eva al desnudo: La maldición del émulo




Todos tenemos émulos, imitadores.


Incluso los imitadores tienen sus copias. Los rasgos de personalidad, las manías, los gustos, las habilidades no tienen variantes infinitas, más bien el catálogo es exiguo, dada la infinidad de personas que pueblan la tierra. Indefectiblemente, entre los aproximadamente 6 millones de seres humanos tienen que forzosamente repetirse estos rasgos aunque combinados entre sí.


Copiar no es malo, en la conformación de la personalidad uno ha de elegir atributos que quisiera para sí y no se le han dado de forma natural y espontánea. Todos hemos tomado prestadas consciente o inconscientemente frases hechas, tonos de voz a la hora de expresar emociones, estilismos que nos pudieran favorecer. Y al final la combinación de todo, lo prestado y lo natural, dan como resultado una personalidad quizá única.


Lo malo (siempre hay un pero) es cuando para tomar estos préstamos de personalidad elegimos un único modelo, a una única persona.


Los imitadores humoristas siempre argumentan que ellos imitan desde la admiración, y así debe ser en el caso de los imitadores de personalidad todo comienza con un acto de admiración, de amor si se quiere, pero esto tiene unos inconvenientes, sobre todo para el copiado, porque el copiado, el poseedor de los atributos codiciados suele ser una persona cercana al émulo. Como decía Hannibal Lecter: “se codicia lo que se ve todos los días”. Y aquí viene el problema, que el copiado se dé cuenta del robo de su personalidad tal como sucede con las psicólogas de la película “Instituto Básico”, y que a mí personalmente no me quedó nada claro, ambas se acusaban de lo mismo: de copiarse, de teñirse el pelo del mismo color, etc. Pero ¿quién de las dos es el original? Y, claro, no puede acabar bien una relación así, al final, original y copia aspiran al uso exclusivo de su personalidad y en ese uso sólo puede quedar uno, y o se distancian o surge el conflicto que acaba distanciándolos.


Hay copias que no se limitan a tomar pequeños préstamos, por el contrario aspiran al total uso y disfrute de la personalidad de un ser concreto. Sí, estamos ante el prototípico caso de Eva Harrington, el antológico personaje de “Eva al desnudo”. Eva, Eve, se aproxima a Margot Channing (Bette Davies) desde la admiración, desde una aparente humilde admiración se introduce en la vida admirada hasta que surge esa oportunidad de la sustitución, y de ir conquistando parcelas de la vida ajena hasta echar a la antigua propietaria de la suya propia.


Pero los originales no se pueden eliminar, están ahí para recordarle al imitador el vacío existencial que quería rellenar copiando. Y el copiador no es una persona fácil de conformar, si lo fuera no desearía completar de este triste modo su vida. Y aunque todo empezara desde la admiración, esa curiosa forma de amor, ésta se torne en odio y aversión. Quizá por eso el imitador acaba siendo hostil al ORIGINAL.


En este punto del proceso admirativo copiatorio hay un grupo de sujetos que eligen el camino opuesto, conforman su personalidad por contraposición al sujeto admirado o que perciben como alguien que les hace sombra frente a un grupo social dado. Es como el negativo fotográfico del copiador. En esta vía de contraposición el sujeto anticopia aspira, de una forma a menudo necia, a hacer prevaler sus rasgos de supuesta personalidad con frecuencia falsos, pero destina la maniobra a socavar al opuesto:


Si en un grupo social se alaban las habilidades culinarias de una persona este tipo de anticopia intentarán quitar valor a esa habilidad diciendo cosas del tipo:


“Yo no me complico con las comidas”


“Yo como comida rápida”


“Cocinar es perder el tiempo”


“No tiene otra cosa que hacer”


En el caso de la limpieza, el caso se hace valer diciendo cosas como:


“Yo no limpio”


“Mi casa está sucia”, cosas que a veces son mentira, pero se dicen quizá con el objeto de que el sujeto habilidoso sea convencido de cesar en sus habilidades, por la supuesta inutilidad de éstas y así estas personas que se sienten en la sombra seguir disfrutando de su comida rápida (arroz tres delicias del Mercadona a diario), de su desgana higiénica, etc., sin tener que sentirse en inferioridad de condiciones; aunque no haya realmente un público que valore tales condiciones, pero en una suerte de paranoia el sujeto cree que sí, que el habilidoso es percibido por los demás como alguien mejor que él, que pongamos por ejemplo, en un vecindario, los vecinos estuvieran atentos a la olimpiada personal que tiene curso en la mente del sujeto anticopia. Este tipo de personas se sienten agredidos, quizá en inicio fuera porque oyeran algo de esa persona en positivo y por estar esa persona en su ámbito no pueden ignorar. Y es que ser anticopia es menos trabajoso que ser imitador, porque si el sujeto objeto de estas reacciones tiene mucha actividad el anticopia, si es vago, prefiere abrazarse a este método, antes que imitar a mejor lo que el otro hace. Salvaguardar su ego y su supuesta autoestima, que no es tal, porque alguien que se estima no se publicita como analfabeto que no lee, que no escribe, que no se forma opiniones; ni se publicita como una persona que sin oficio no hace nada de nada en su casa aunque tenga todo el tiempo del mundo.


No se trata de copiar una M escrita de un modo distinto al de los cuadernos de caligrafía Rubio, o de delinearse los ojos, aunque la copiadora llegue a presentarse en público cual Cleopatra enlutada sólo porque cree que el delineador es lo que hace a la sujeta de su admiración dotada del especial poder de seducción que le hizo conseguir marido. Estamos hablando de copiar en extremo, o de todo lo contrario, acabar perjudicándose uno mismo prescindiendo de actividades porque cree que hacerlas le convierte en copia.


Debe ser muy insatisfactorio este tipo de vida, vivir la vida pendiente del obrar o el no obrar de otro. Carecer de la inspiración necesaria para hacer cosas tan normales como imaginar, intuir, sentir, leer, escribir, coser, cocinar, limpiar, reír, y tantas cosas. Tener que esperar que alguien tome una iniciativa para imitarlo en el mismo sentido o en el contrario.


En ambos casos, copia y anticopia se quedan desamparados cuando el modelo inspirador de su conducta o anticonducta desaparece. ¿Qué sucede en este caso? Siempre me he preguntado que hicierón mis copias y anticopias con su vida cuando yo empecé a vivir la mía lejos de su mirada de Xerox.





martes, 5 de mayo de 2015

Simplemente: Hasta la Luna, Jesús Hermida

Qué decir de Hermida... ¡Guau! Toda una institución en el periodismo. Un pionero de la televisión matinal en nuestro país. Un dominio, una prestancia, una autoridad... IRREPETIBLE. Pese a crear escuela ninguno de sus discípulos han igualado ni lo harán el marcador de este señor. Cierto que explorar territorios vírgenes te catapultan a la leyenda y que eso es un privilegio a la hora de alcanzar hitos históricos. Yo conozco su faceta televisiva, pero aquí un blog que frecuento nos trae al conocimiento a unos y al recuerdo a otros la faceta radiofónica de Don Jesús Hermida: el blog "radiochips", el título de la entrada que a su vez me ha insipirado la mía: "adiós a Hermida". (Disfrutad y aprended de este blog).
Todos los demás, los que no somos radiochip y su muy recomendable blog, diremos tópicos, todos los que le conocemos por pasear su flequillo por los platós y cruzar las piernas de aquella manera tan emulada y exagerada por Josema Yuste en sus imitaciones. Por los zapping recordaremos también su famosa pelea con María Teresa Campos que muchos nos creímos por ser aún impúberes, pero entre bromas y veras detectábamos unos retintines, unas tiranteces, y algo más, eso que a raíz de la serie "Luz de Luna" se empezó a denominar T.S.N.R., o dicho con todas las sílabas: Tensión Sexual No Resuelta. 



Otro hito, quizá poco digno de presumir para algunos, de aquel programa de nada original nombre: "Por la Mañana", fue el darnos a conocer las telenovelas, que no empezaron en Cristal. En "Por la Mañana" cogiendo visos de programa contenedor además de magazine a la americana se emitieron "Los ricos también lloran", "Lo imperdonable" (con Amparo Rivelles, nuestra Amparo), y "Cuna de lobos" (con la del parche, como decía mi abuela).


Mencionados estos personales recuerdos sólo añadir que Don Jesús Hermida será para siempre aquel periodista español que nos narró el primer paseo por la Luna, y esto no se lo podrá imitar nadie.

Para compensar la mala calidad del sonido del vídeo anterior, pongo esta canción, porque como dice "radiochips" todos los periodistas que cuentan en su bagaje con una etapa norteamericana vuelven con un algo, con un poso, y con una cantidad de referencias musicales que sin ellos jamás habríamos descubierto el resto de los mortales.